jueves, 15 de julio de 2010
Ruinas
La civilización maya habitó una vasta región ubicada geográficamente en el territorio del sur-sureste de México, específicamente en los cinco estados de Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán; y en los territorios de América Central de los actuales Belice, Guatemala, Honduras y El Salvador, con una historia de aproximadamente 3000 años.
Calendario MaYa
El calendario maya es cíclico, porque se repite cada 52 años mayas. En la cuenta larga, el tiempo de cómputo comenzó el día 0.0.0.0.0 4 ahau, u 8 cumkú (en notación maya) que equivale al 13 de agosto del 3114 a. C. en el calendario gregoriano1 y terminará el 21 de diciembre de 2012.
Calendario Maya
El calendario maya es cíclico, porque se repite cada 52 años mayas. En la cuenta larga, el tiempo de cómputo comenzó el día 0.0.0.0.0 4 ahau, u 8 cumkú (en notación maya) que equivale al 13 de agosto del 3114 a. C. en el calendario gregoriano1 y terminará el 21 de diciembre de 2012.
Símbolos
Exísten diferentes símbolos dentro de la cultura maya para identificar objetos con un conocimiento de la sociedad.
jueves, 15 de abril de 2010
A casa de Marta
Al pasar una semana de recordar esta imagen, se da cuenta de que tenía alguna relación con la tía abuela Marta, de su padre.
Por la gran curiosidad que tenía de averiguar le pregunta a sus padres para saber la dirección e ir en busca tras ella. Se demoro 2 días viajando en un antiguo tren hasta que finalmente en lo alto de una montaña ve la casa que su padre le había descrito.
Caminando a la casa estaba muy ansiosa, pero cuando toco la puerta empezó a sentir algo de miedo. Repentinamente la tía abuela abre la puerta.
Marta: ¿Si?
Emily: hola tía, vine a visitarla… soy su nieta
Marta: si, si pasa hace mucho frió allá afuera.
Emily: gracias.
Al entrar se encuentra con cosas muy antiguas, tenía un cuervo, un piano y muebles viejos.
Marta le ofrece un te caliente para el frió, Emily agradecida lo recibe y se lo toma.
Lo que no sabía era que la tía abuela le había puesto una pócima para dormirla.
La tía en ese pequeño pueblo se caracterizaba por vender sus plantas de hechicería y sus pócimas, a eso se dedicaba junto a su cuervo.
Luego de media hora Emily ya se encontraba en un sillón durmiendo profundamente.
Mientras Emily dormía, Marta fue en busca de algo junto a su pequeño cuervo y no regresó hasta el otro día, Emily despierta muy agotada y soñolienta, no podía entender que le estaba pasando, trato de llamar a su tía, pero al hacer esto se dio cuenta de que había perdido su voz. Emily se empezó a desesperar cuando en esos instantes toca la puerta su tía y no sabe que hacer si abrirle o escapar por la puerta trasera.
Por la gran curiosidad que tenía de averiguar le pregunta a sus padres para saber la dirección e ir en busca tras ella. Se demoro 2 días viajando en un antiguo tren hasta que finalmente en lo alto de una montaña ve la casa que su padre le había descrito.
Caminando a la casa estaba muy ansiosa, pero cuando toco la puerta empezó a sentir algo de miedo. Repentinamente la tía abuela abre la puerta.
Marta: ¿Si?
Emily: hola tía, vine a visitarla… soy su nieta
Marta: si, si pasa hace mucho frió allá afuera.
Emily: gracias.
Al entrar se encuentra con cosas muy antiguas, tenía un cuervo, un piano y muebles viejos.
Marta le ofrece un te caliente para el frió, Emily agradecida lo recibe y se lo toma.
Lo que no sabía era que la tía abuela le había puesto una pócima para dormirla.
La tía en ese pequeño pueblo se caracterizaba por vender sus plantas de hechicería y sus pócimas, a eso se dedicaba junto a su cuervo.
Luego de media hora Emily ya se encontraba en un sillón durmiendo profundamente.
Mientras Emily dormía, Marta fue en busca de algo junto a su pequeño cuervo y no regresó hasta el otro día, Emily despierta muy agotada y soñolienta, no podía entender que le estaba pasando, trato de llamar a su tía, pero al hacer esto se dio cuenta de que había perdido su voz. Emily se empezó a desesperar cuando en esos instantes toca la puerta su tía y no sabe que hacer si abrirle o escapar por la puerta trasera.
A bibloteca
Emily decide ir corriendo a la biblioteca para no perder más tiempo ya que le intrigaba mucho aquella imagen, llegada a la biblioteca la noche ya había caído por lo que Emily tuvo que prender un candelabro pero el frió más las corrientes de viento en la habitación dificultaban sus intenciones que tanta angustia le causaba el no saber de dónde provenía esa maldita y escalofriante imagen, libro tras libro búsqueda tras búsqueda el ambiente se hacía cada vez más tranquilo y en un silencio faraónico más un aire que hacía pesar el ambiente Emily decide tomar un descanso, pero al momento de tomar asiento una repentina brisa apaga las velas del candelabro lo que descompone la tranquilidad de Emily y en la desesperación decide correr a oscuras es ahí cuando tropieza escalones abajo y cae en un extraña y aún más fría parte de la biblioteca donde los muros eran de piedras y se podía escuchar las ratas al caminar, fue en ese entonces donde pudo ver una pequeña luz al final del pasillo al llegar a ella se dio cuenta que era un libro donde la tapa tenía estampada ésta extraña imagen y era su contorno quien emitía aquella luz. Emily temblaba del miedo no sentía sus piernas, sus labios resecados y sus manos transpiradas no permitían que pudiera comportarse de manera normal frente a este terrorífico episodio. Se encontraba en la disyuntiva de tomar el libro y leerlo o salir corriendo a su habitación y olvidarse de lo sucedido.
jueves, 8 de abril de 2010
Extrañas Sensaciones
Estaba ahí otra vez, esa extraña sensación que sólo sientes cuando no sabes qué se esconde.
Emily no lo soportaba más, ya no dormía, no sentía, no reía. Era solamente esa extraña sensación y ella.
Pasaba las noches en su balcón a la luz de la luna con su única compañía, su gato. No fue hasta una noche de tormenta luego de una pelea con sus padres tras la cena en la que corrio a su balcón, derrepente cuando ella estaba próxima a quitarse la vida sujeta a la baranda con una soga en mano y un llanto inconsolable se escucha en estruendo, un estruendo tan intenso como el choque de dos trenes a máxima velocidad, el que desequilibra a Emily haciendola caer.
Emily no lo soportaba más, ya no dormía, no sentía, no reía. Era solamente esa extraña sensación y ella.
Pasaba las noches en su balcón a la luz de la luna con su única compañía, su gato. No fue hasta una noche de tormenta luego de una pelea con sus padres tras la cena en la que corrio a su balcón, derrepente cuando ella estaba próxima a quitarse la vida sujeta a la baranda con una soga en mano y un llanto inconsolable se escucha en estruendo, un estruendo tan intenso como el choque de dos trenes a máxima velocidad, el que desequilibra a Emily haciendola caer.
Una hora después al levantarse se da cuenta de una pequeña, roñosa y antigua puerta en el suelo entre medio de los arbustos de su jardín, la puerta tenía un código secreto al que a Emily le llamo mucho la atención tras varios intentos Emily no consigue decifrarlo.
Al día siguiente jugando en su jardín decide ir a visitar la puerta de anoche y se da cuenta que bajo el código había una estampa, de pronto en el fondo de su memoria recuerda haber visto aquella imagén en algún lugar de su infancia pero no recuerda dónde, si fue una vieja amistad de la familia o algún libro en la biblioteca de su hogar...
Al día siguiente jugando en su jardín decide ir a visitar la puerta de anoche y se da cuenta que bajo el código había una estampa, de pronto en el fondo de su memoria recuerda haber visto aquella imagén en algún lugar de su infancia pero no recuerda dónde, si fue una vieja amistad de la familia o algún libro en la biblioteca de su hogar...
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